miércoles, 10 de febrero de 2016

Se traslada el blog

He decidido utilizar mi antigua web de grunge, www.grungeislife.com, como medio para publicar mis escritos. Dejaré este blog abierto, aunque subiré todo lo escrito en él en la página web. Disculpad las molestias.


Estamos ante un posbarroco cinematográfico

Para que comprendáis esta extraña y poco usual comparación entre lo posbarroco y la cartelera actual tengo que explicaros brevemente las características básicas del posbarroco como movimiento literario. Tranquilos, no tenéis por qué aprender, limitaros a memorizarlo cinco minutos mientras leéis el texto. Ya veréis que al final hasta tiene un poco de sentido. Por cierto, Maribel -mi profesora-, gracias por hacer el guiño hacia la nueva película de Star Wars, me ha abierto los ojos por completo y me has dado la idea.

El posbarroco mayormente fue la continuación de las características barrocas en la literatura de la primera mitad del siglo XVIII, sobre todo haciendo incidencia en el teatro. Este teatro se caracteriza por:

-Escenografia compleja, primando la decoración y los efectos para admirar al público más que el texto literario en sí.

-Personajes prototipos, pobres, vacíos, repetidos a lo largo de las obras con tediosa insistencia.

-Tramas parecidas o casi iguales, muchas de ellas dentro del ámbito mágico, religioso o heroico.

-Suelen evocar las pasadas glorias nacionales. Adoran lo anterior ante todo y se quedan atascados en ello.

-Diálogos elevados y rimbombantes deseosos de ocultar la falta de originalidad en la narración de la obra dramática.

-Convertir el teatro en un negocio queriendo extraer el mayor beneficio de la forma que sea.

Y otros pocos más que descarto por no ser del todo útiles para el símil. Como último apunte añadir que esta etapa de la literatura destaca en la historia como una de las menos originales que ha tenido nuestra lengua, no teniendo demasiado adeptos en la actualidad -ni entre los literatos de la época-. ¿Os suena de algo lo expuesto más arriba? ¿No se parece a algo de lo que estamos rodeados a diario? Analicemos la cartelera de hoy en día. Lo siento si os parece demasiado subjetivo, intentaré hacerlo lo mejor que pueda:

-Superhéroes y villanos por doquier. En relación con personajes prototipos. También podría entenderse con lo de tramas parecidas en todas las películas. Sea como sea, a día de hoy en el cine vemos enmascarados y tipos con trajes por todas partes. Un poquito de originalidad o salirse de lo establecido no vendría mal. Puede también compararse con la caída en picado del género del horror en el cine, donde los personajes han caído en la rutina del arquetipo perfecto, con argumentos torpes que recuerdan demasiado al de otras películas. Hace años que no se realiza una película de terror, a nivel comercial, mínimamente original y nueva.


-Efectos digitales hasta para el detalle más fácil de crear a través de la realidad. En relación con lo de la esceneografía compleja. Es cierto que hay películas de acción con buenos efectos digitales y tramas entretenidas, pero da la sensación que multitud de ellas comparten demasiado en común y que tapan sus defectos con estallidos, colores y una calidad gráfica pasmosa. Películas como "Avatar" tienen mucho mérito en cuanto a sus avances en los efectos digitales, pero son terriblemente sosas -y sospechosamente parecidas a otras películas-.


-Remakes, secuelas y otras bestias -haciendo referencia a una entrada de este mismo blog-. En los últimos años no hemos dejado de asombrarnos por la inmensa cantidad de filmes que continúan en cierta medida con algo que ya se ha hecho con anterioridad. Parece que la década de los 90s es la década fetiche para los directores de hoy día, queriendo muchos de ellos raspar de la moneda sagrada. Sagas cinematográficas con historias finiquitadas de repente renacen de la nada junto a nuevas ideas, ideas que no eran necesarias y que acaban por empeorar el sentido general de la cinta.


(Estoy bien, pero... ese maldito pero)

-Money money money. No podemos negarlo aunque nos duela. Hay películas que son visiblemente intentos desesperados por sacar dinero de donde sea. Desde comedias románticas vacías de sentido pero llenas de caras célebres a thrillers de acción protagonizados por actores y actrices de décadas pasadas. No nos aportan nada realmente a nosotros, quizás un poco de añoranza, pero sí a ellos, millones y millones de dólares.


(Soy super necesario sí...) 

-Me da igual que aparezca una frase mítica e universal en una película, si el resto de diálogos no son más que huecos en el guion metidos con calzador para hacer tiempo, la película entonces dejará bastante que desear. Tampoco me vale copiar el éxito de sagas literarias célebres que han triunfado y después hacer películas un tanto flojas y forzadamente rebajadas para llenar más los cines.


(Calla que mejoré en las siguientes, aunque uy, quizás esa cuarta película sobró).

A grandes rasgos siento que esto es nuestro cine actual. No quiere decir que no haya algunas buenas producciones actualmente, siempre las hay aunque el panorama sea de carbón, pero lo que gusta, lo que llena las salas de cine, acaba siendo esto -también extensible a la música, aunque con algunas características variadas-. Algo que ya hemos visto miles de veces, algo que sabemos cómo finalizará, pero que seguimos viendo anonadados. Quizás es culpa del propio público, que se conforma con poco, o que también se ha quedado atascado en algún punto del pasado. El cine profesional o de "élite" poco a poco ha buscado una degeneración autoinfligida, pretendiendo gustar sin gustarse a sí mismo. Ya no podemos ver una película y no soltar más "peros" que exclamaciones de júbilo. No sé cuánto se extenderá este posbarroco cinematográfico, esta edad de mediocridad pero que tanto nos gusta. ¿Cuándo nos daremos cuenta de que en verdad quizás no nos gusta tanto?


domingo, 7 de febrero de 2016

Poemas premonitorios

César Vallejo

No acertó ni en la estación ni en el día, pero sí en la localización y en las circunstancias, pues falleció un 15 de abril de 1938 en París, en un día lluvioso como afirma en el poema: Me moriré en París con aguacero, un día del cual tengo ya el recuerdo. No atinó con la hora exacta, ya que falleció un viernes; por lo menos hay que darle el mérito de que se quedó cerca del día exacto.

Me moriré en París con aguacero, 
un día del cual tengo ya el recuerdo. 
Me moriré en París -y no me corro- 
tal vez un jueves, como es hoy, de otoño. 

Jueves será, porque hoy, jueves, que proso 
estos versos, los húmeros me he puesto 
a la mala y, jamás como hoy, me he vuelto, 
con todo mi camino, a verme solo. 

César Vallejo ha muerto, le pegaban 
todos sin que él les haga nada; 
le daban duro con un palo y duro 

también con una soga; son testigos 
los días jueves y los huesos húmeros, 
la soledad, la lluvia, los caminos...

Armando Buscarini


El menos conocido, y con diferencia, de todos los poetas aquí adjuntados. Él perteneció a la bohemia española de principios del siglo XX, y pronto se vio afectado por esa forma de vida, acabando sus últimos años de existencia dentro de una institución mental en Logroño. Nacido en Ezcaray, lo que llama la atención es que supo averiguar que en un futuro una calle del pueblo que le vio nacer llevaría su nombre, como dice al principio del poema: A una clara avenida, con frondoso arboladodarán mañana el nombre de quien tanto luchó. Esta capacidad de averiguar el futuro tiene mucho mérito, pues Buscarini fue casi un completo desconocido en su vida y casi desapareció del horizonte literario una vez fallecido, por lo que incluso una calle con su nombre en su pueblo de origen era algo raro difícil de imaginar, más por sus extravagancias y forma de vida.

A una clara avenida, con frondoso arbolado
darán mañana el nombre de quien tanto luchó.
Mi corazón entonces se hallará agusanado
En el estrecho nicho que la piqueta abrió 
En un bello crepúsculo, tranquilo y perfumado
resonarán canciones que no escucharé yo.
El amor de los niños habrá purificado
la memoria de un hombre que por amar, pecó.
¡Avenida soleada de un futuro lejano!
¡En mis sueños te veo surgir esplendorosa!
¡Tú has de ser en las noches cálidas de verano
vía abierta a la dulce confidencia amorosa,
cuando crucen los novios cogidos de la mano
y se alejen las almas un poco de la prosa...! 

('Avenida Armando buscarini'. El rufián, 1928)

Federico García Lorca

Todos conocemos la trágica historia de uno de nuestros poetas más célebres. Siendo fusilado el 18 de agosto de 1936 en un camino, a día de hoy no conocemos la localización exacta de su cadáver. En este poema premonitorio, escrito entre 1929 y 1930, es capaz de adivinar que moriría rodeado de naturaleza, bajo el cri cri de las margaritas y que la persecución a la que se vio visto fue considerable, Recorrieron los cafés y los cementerios y las iglesias, abrieron los toneles y los armarios. Y sobre todo, lo que más nos llama la atención; supo que jamás íbamos a encontrar su cuerpo. Ya no me encontraron. ¿No me encontraron?No. No me encontraron. De forma más optimista, dentro del tono melancólico y pesimista de este poema, también vaticinó que los nombres de aquellos asesinados bajo la represión fascista nunca desaparecerían: y que el mar recordó ¡de pronto! los nombres de todos sus ahogados.

(...)
Cuando se hundieron las formas puras
bajo el cri cri de las margaritas,
comprendí que me habían asesinado.
Recorrieron los cafés y los cementerios y las iglesias,
abrieron los toneles y los armarios,
destrozaron tres esqueletos para arrancar sus dientes de oro.
Ya no me encontraron.
¿No me encontraron?
No. No me encontraron.
Pero se supo que la sexta luna huyó torrente arriba,
y que el mar recordó ¡de pronto!
los nombres de todos sus ahogados.

Fragmento de la "Fábula y rueda de tres amigos", Poeta en Nueva York


A medida de que descubra o lea más poemas premonitorios, volveré a hacer una entrada de este tipo. Espero que disfrutéis de ello.


sábado, 6 de febrero de 2016

La pava de Cazalilla

Decís que la pava caerá,
y así lo hará vuestra decencia.
Sois un canto primitivo
que en su última resonancia
insiste en alargar la muerte
creando muerte sobre muerte.
No sois más que el vestigio
de una rana moribunda que
con su vómito se come a la locura.
Sois una nube negra, lisa y plana,
hija de esa misma pava, a la que,
como diminutos titanes, extirpáis
y no dejáis que os amamante.

Dicho en román paladino, que sois unos indecentes y un tanto enfermos mentales. Que ya es hora de que os muráis, Dios mediante y si es posible desde una iglesia, como tanto parece que os gusta todo eso, y deis paso a una sociedad un tanto más abierta y menos asesina -porque en alguna ocasión la pava ha muerto, claro-. Os recuerdo que la mayoría de vosotros sobrepasa los 60 o incluso los 70 años; empezad a hacer buenas acciones... porque Dios para vosotros está a la vuelta de la esquina y no lleváis haciendo muchos méritos para ganaros su favor divino, haciendo eso con su creación. A lo mejor algún día me sitúo en lo más alto de una iglesia y lanzo a alguien al suelo, porque oye, es una tradición de hace dos minutos que me acabo de inventar, pero oye, una tradición, y además no sufre ni lo mato yo, es la gravedad quien lo hace, que hubiera tenido alas como la pava... ¡Gravedad asesina, gravedad ETA!